Con profunda tristeza despedimos a la Dra. Nidia Basso, una gran mujer y extraordinaria científica. La Dra. Basso fue una pionera de la ciencia argentina, en una época en la que era poco común encontrar mujeres que se dedicaran a ella. Nidia publicó una gran cantidad de trabajos científicos de gran calidad, destacándose en el estudio del sistema renina-angiotensina-aldosterona y su relación con la hipertensión arterial. Fue socia fundadora de sociedades científicas como la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial (SAHA), en la que tuvo una actividad extraordinaria. Formó recursos humanos, dirigiendo becarios y tesistas desde su función como Investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), en el que alcanzó el grado de Investigadora Principal; pero además de su función en esos roles fue, fundamentalmente, un maravilloso ser humano, comprensiva, cálida a pesar de su rigurosidad y disciplina. Destacan sus colaboradores cercanos que compartir reuniones científicas con ella era sumamente enriquecedor, no sólo por sus conocimientos en la temática sino por su manera inquisitiva y curiosa de asimilar la novedades, siempre ansiosa de actualizar sus saberes, que eran muchos.
Fue la primera mujer que ejerció la presidencia de la AAPC, y en su calidad de miembro del Colegiado Directivo de la AAPC fue una destacada colaboradora durante muchos años, particularmente, en la función de Editora de la revista Ciencia e Investigación, que desempeñó con auténtica entrega y eficacia, convirtiéndose en Editora Emérita a partir de 2020. Fue un ejemplo de vida, un modelo a seguir, nos costó no poder compartir momentos con ella en estos últimos dos años debido a la pandemia pero siempre teníamos la esperanza de volverla a ver en persona y de disfrutar de su compañía, lo que ya no podrá ser. La extrañaremos enormemente y siempre sentiremos su presencia entre nosotros.